Fueron 7 los emprendedores elegidos para ser parte del Campamento Emprendamos con CACPECO y su proceso de formación financiera. Recibieron capital semilla, entre 500 y 1000 dólares, para fortalecer sus negocios.
Recibieron capacitación en educación financiera y en herramientas para administrar mejor un negocio. La Fundación Apoyo Solidario para la Familia (ASOF) dictó un taller virtual de 20 horas de duración, distribuido en 5 semanas.
La metodología del campamento fue “aprender haciendo”, con el objetivo de fortalecer tres aspectos claves de los emprendimientos: Su modelo de negocios, su discurso de ventas y sus finanzas.
El proceso culminó con la entrega de capital semilla a 7 proyectos ganadores.
Estos fueron los emprendedores beneficiados:
- Mery Espinoza con SmartLink.
- Francisco Banderas con PetCollagen.
- María Arredondo con Sazón BarlBurger.
- Emilia Veliz con la elaboración de chocolate amargo en tabletas.
- Katty Soria con G&S Clean.
- Verónica Cali con QUIRU Muebles y Tejidos.
- Sol Arcos con Renace.
¿Cómo fue la experiencia para los emprendedores en el Campamento Emprendamos con CACPECO? ¿Cuáles fueron sus mayores aprendizajes y cómo invirtieron el capital semillas? A continuación, algunos de los ganadores nos cuentan los detalles:
Mery Espinoza con SmartLink, negocio venezolano- ecuatoriano
“Si lo puedes creer lo puedes crear”
Nuestro emprendimiento se dedica a la fabricación de productos de limpieza e higiene personal. Somos un negocio asociativo, venezolanos y ecuatorianos, apasionado por suministrar productos de alto valor a precios asequibles. Estamos en el mercado hace 3 años. Los principales retos han sido poder contar con un local y adquirir los registros sanitarios.
Nuestra motivación para participar en el campamento fue adquirir más conocimientos financieros. El mayor aprendizaje fue que no podemos controlar todo y por eso es vital la asociación para avanzar. Además, del manejo a detalle en cuanto a los costos.
El capital semilla recibido lo usamos para adquirir una laptop. Así llevaremos de forma organizada fórmulas, catálogos, lista de precios, lista de clientes, registros contables y tendremos un detalle de ingresos, costos y gastos.
Francisco Banderas con PetCollagen, desde Quito
“Luchemos para sacar adelante nuestros emprendimientos”
Mi emprendimiento PetCollagen es la primera proteína hidrolizada de colágeno para perros, gatos y caballos. La falta de colágeno con el tiempo les provoca problemas de movilidad, de pelaje, empiezan a tener problemas de articulaciones y padecer displasia de cadera. El colágeno lo que hace es lubricar las articulaciones para que estén saludables. Funciona a nivel preventivo y correctivo.
El producto tiene ya dos años y es el único colágeno en Ecuador con registro sanitario. La materia prima la traemos de España y la envasamos en el país. El principal reto ha sido obtener el registro sanitario y posicionar el producto en el público. Muchas veces se piensa que el colágeno es solo para humanos.
En el campamento aprendí sobre planes de negocios e identificar qué quieren los clientes. Con el registro sanitario ya hemos podido entrar a cadenas de supermercados y el capital semilla lo invertiremos en la primera producción. Creemos que tenemos un producto bueno, sabemos que va a ayudar a los animalitos y a mejorar su calidad de vida. No pensamos solo en la parte económica.
María Arredondo con Sazón BarlBurger, negocio venezolano
“Vale la pena luchar por lo que quieres tener”
Soy venezolana y mi emprendimiento es de comida rápida. Hace 3 años me dedico a la venta de hamburguesas, hot dogs, salchipapas, empanadas y más. Los permisos para trabajar libremente sin temor a los metropolitanos, ha sido mi principal desafío.
Mi interés en el campamento fue aprender nuevas destrezas para trabajar con el público, y más con uno que no es de mi nacionalidad. El capital semilla fue una completa bendición ya que sirvió para completar la compra de una moto para los repartos a domicilio.
Emilia Veliz con la elaboración de chocolate amargo, desde Quevedo
“La constancia y la perseverancia son las claves”
La idea del negocio nace por una tradición familiar: elaboramos chocolate y lo hemos hecho parte de nuestra dieta diaria. Además, compartimos la preparación con los amigos en fechas importantes como Navidad y Semana Santa.
Las tabletas de chocolate amargo, hecho con caco nacional, tienen como agregado especias como canela, anís, pimienta dulce y clavo de olor, para que los consumidores preparen la bebida en leche fría o caliente.
Apliqué al campamento para entender cómo emprender, conocer más de finanzas y ahorros. Descubrí que mi mayor reto son el registro sanitario y la tabla nutricional que mi producto requiere para la comercialización.
Como aprendizaje entendí que en el negocio es importante priorizar el ahorro. Por ejemplo, el empaque que utilizaba era muy grande en altura, uno más pequeño me permitirá ahorrar. Asimismo, el capital semilla lo coloqué en un ahorro inversión para hacerlo crecer para que así apoye mi emprendimiento en el futuro.
Katty Soria con G&S Clean, desde Cotopaxi
“Las mujeres somos inteligentes e innovamos. Siempre podemos”
Mi emprendimiento le da una segunda oportunidad a los muebles que tienen tapicería. El servicio es la limpieza de todo tipo de tapicería en las líneas hogar y automotriz. Cuento con maquinaria y productos para remover la suciedad de estos artículos: sillas, colchones, alfombras o vehículos.
El negocio empezó hace un año y mis retos han sido posicionar mi emprendimiento en el mercado local y competir con empresas que viene de fuera de mi cantón Pangua, en Cotopaxi, con precios bajos.
Lo que me motivó a aplicar al campamento fue adquirir nuevos conocimientos y obtener directrices para mejorar el servicio. Con el capital semilla que recibí adquirí unas máquinas para brindar nuevos servicios y disminuir los tiempos de atención.
Verónica Cali con QUIRU Muebles y Tejidos, desde Cotopaxi
“Esto no es para cualquiera, así que debo seguir porque yo soy diferente”.
QUIRU tiene 7 meses desde su creación. Se trata de la elaboración de muebles y tejidos (ropa, uniformes, manualidades) personalizados, diseñados a gusto del cliente, utilizando material amigable con el medio ambiente. Por ejemplo, en los bordados utilizo retazos de tela sobrante de otros proyectos. También reciclo pantalones jeans para hacer llaveros y parches.
El mayor reto para mí ha sido enfrentarme al miedo al fracaso, ya que muchas veces no se aprecia la elaboración de productos fabricados de manera artesanal, se prefiere comprar en almacenes de renombre.
Mi motivación para ser parte del campamento fue conocer las estrategias que ejecutan los emprendedores con experiencia, cómo se maneja el sistema financiero y cómo se aplica el marketing en el mercado.
Aprendí que se debe tener algo ahorrado, por si las cosas no salen como uno quiere. Y nos enseñaron a conocer a nuestro cliente para así innovar.
Con el capital semilla adquirí un celular actual para hacer fotos y videos y arreglé mi computadora. Además, compré insumos al por mayor para abaratar costos. Este capital me impulsa a seguir elaborando ideas en el campo textil, como libros sensoriales, bandanas para perros y gatos, porta cepillos para viajes, llaveros y más.